Más de dos décadas de tradición avalan el Castell de la l´Olla de Altea, un ritual de luz y pólvora que cuenta con la peculiaridad de ser el único en el mundo en el que se lanzan los fuegos artificiales desde el mar, desde ocho plataformas de 15 toneladas cada una.
La noche más cercana a la festividad de San Lorenzo -11 de agosto- tiene lugar uno de los eventos pirotécnicos musicales más esperados por vecinos y turistas de la localidad, que no quieren perderse el gran castillo de fuegos artificiales que ilumina de luz y pólvora la maravillosa bahía de Altea, en la zona de la l´Olla. Organizado en los últimos años por la cofradía Castell de la l´Olla, este imponente espectáculo reúne a orillas del Mediterráneo a más de 50 mil personas deseosas de contemplar una fusión de luz, música y pólvora. De forma complementaria a su celebración, sus responsables ofrecen en paralelo un programa artístico en el que se incluyen actuaciones de danza y otras artes escénicas, además de exposiciones.
Un espectáculo para el que se requieren más de 2 mil kilos de pólvora, el Castell de l’Olla en Altea nace como un punto de iluminación para la medianoche de verano, que cuenta con un espléndido montaje de fuegos de artificio lleno de palmeras, ramilletes y efectos sonoros, disparados desde el mar. En la pasada edición el espectáculo estuvo a cargo del pirotécnico Carlos Caballer, quien se encargó de poner el toque de fantasía y esplendor a la fiesta.
En los últimos años, el Castell de l´Olla ha ido incorporando nuevos elementos, como una forma de reclamo turístico en el que las embarcaciones de la bahía de Altea se concentran para admirar un acontecimiento que forma parte ya, de uno de los grandes eventos imprescindibles dentro del calendario pirotécnico nacional.
La importancia de este tradicional evento está reconocida con la distinción del premio al Mérito Turístico, en la categoría de oro de la edición de 1999, que le otorgó el Patronato Provincial de Turismo de la Costa Blanca… ¡todo un espectáculo de luz y color que no te puedes perder!
Los foráneos y vecinos que visiten la apacible localidad de Moraira durante el mes de agosto, podrán disfrutar de sesiones de jazz en directo.
Durante once días a lo largo del mes de octubre, Calpe celebra una de sus fiestas más emblemáticas y divertidas, que cuenta con la distinción de ser la más grande y pionera de nuestro país.
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